Los expertos en materia de sueño y descanso, se desgañitan en hacer recomendaciones sobre lo importante que es dormir y descansar bien, para el rendimiento diario y para garantizarse una buena y duradera salud.
Así pues está claro que antes de irse a dormir, si tenemos por costumbre mirar un rato la televisión, hay que mover el mando hacia una programación tranquila y relajada, dígase una película entretenida (si puede ser no violenta mejor), un documental, una serie cómica, etc… y por tanto queda claro y por prescripción facultativa que hay que huir de esas programaciones que hacen del insulto, la agresividad, o la falta de respeto su mayor valuarte.
Algunas mañanas al ir al trabajo, observo gente con el ceño fruncido, y pienso, vaya este señor ayer antes de dormir estuvo viendo a esos tertulianos que riñen a ver cuál es más de derechas y dice la barbaridade más grande; o a ese grupo de periodistas que los viernes rajan a todo bicho viviente, con “Princesa del Pueblo” incluida.
Los segundos al menos no se esconden y van de “programa show”, pero los primeros van de medio de comunicación con rigor, seriedad y objetividad, lo que casi los convierte en programa de humor.
Desde luego que los medios de comunicación privados y algunos públicos (
Yo como quiero tener una óptima calidad de vida y para ello necesito tener una muy buena salud, desde hace tiempo he quitado de la TDT de mi casa ese canal con eslogan de toro que embiste a todo aquel que no piense como su director; y os de reconocer que funciona, me voy siempre a dormir súper tranquilo y relajado.