MOLINA DE ARAGÓN
Por fin diciembre, está trayendo todo el agua, que desde la primavera no había caído en el interior de la Península Ibérica; tras las fuertes nevadas y la lluvia que está acompañando a los primeros días de la navidad, los arroyos, ramblas y ríos de nuevo están cobrando soniquete de vida y existencia.
En esta tarde de navidad, he tenido el placer y lujo de dar un paseo por las orillas del río Tajo, observando la gran crecida que éste lleva por la aportación que cientos y cientos de arroyos le van dando.
Desde Molina de Aragón tomando la carretera que va hacia Peralejos y desviándonos en el antiguo poblado de Terzaguilla, tras haber pasado la impresionante casona que preside la finca denominada Vega de Áreas, y la Salinas que en otros tiempos fueron epicentro de la distribución de sal, no sólo de la comarca de Molina, sino de toda Castilla.
ALMACÉN SALINAS DE ARMALLÁ
Llegamos al precioso pueblo de Taravilla, que se encuentra en lo alto de un precipicio con vistas a los cañones del río Cabrillas; aquí la orografía es muy accidentada, por lo que los desniveles son muchos y de gran intensidad.
Tras pasar el pueblo de Taravilla, bajamos hasta unos refugios, de donde parte una pista forestal que se dirige a una torre de vigilancia de incendios, y a Peralejos de las Truchas, pasando por la impresionante laguna de alta montaña con el mismo nombre del pueblo (Laguna de Taravilla), y la visión en frente del gran salto que hace el Tajo, en las conocidas popularmente como chorreras o salto de Poveda.
LAGUNA DE TARAVILLA
Sin haber dejado la carretera y yendo en paralelo al río Cabrillas, observaremos los impresionantes cañones y farallones de roca que nos rodean, todo ello acompañado de un tupido bosque de coníferas, donde lo que más abunda son los pinos.
LAS CHORRERAS
Así pues tras superar varios valles, llegamos al cañón del “rey” Tajo, que en esta tarde de navidad venía con sus aguas embravecidas por una importante crecida.
RÍO TAJO CRECIDO A SU PASO POR EL PUENTE DE POVEDA
A lo largo de toda esta carretera, hay varias pistas forestales en buen estado, y que conducen a parajes impresionantes como a la desembocadura del Cabrillas en el Tajo, junto al puente de Peñalén, al salto de Poveda, o hacia el corazón del Parque Natural, pasando por la fuente de las Tobas, la Falaguera, la Peña de la Gitana, etc… para acabar bajo la cascada de la escaleruela, o el Puente de San Pedro.
LAS TOBAS
Hoy he llegado hasta la preciosa localidad de Poveda de la Sierra; donde a la entrada del pueblo, te recibe la escultura cincelada en roca de un Ganchero; en recuerdo de aquellos hombres que trasladaban la madera por el río desde las altas montañas del Señorío de Molina hasta Aranjuez.
ESCULTURA DE GANCHERO
(POVEDA DE LA SIERRA)
En Poveda de la Sierra, las chimeneas estaban como se suele decir a toda máquina, echando un humo blanco, fruto de la combustión de las leñas de pino, roble y encina que abundan en la zona, y en previsión del nuevo frente de nieves que se ha anunciado para la zona.
POVEDA DE LA SIERRA
El transcurrir por todas estas zonas lleva consigo, tranquilidad, paz y sosiego; no es difícil ver animales tales como ciervos, corzos o cabras montesas. Y el aire puro de la zona, junto a lo agreste del terreno, te evaden de la rutina, el ruido, las prisas, etc…
Una vez más desde mi humilde blog, os recomiendo la práctica de salir al campo, y la visita a una de las zonas más desconocidas y bonitas de nuestro país, como es la Comarca del Señorío de Molina-Alto Tajo.