La solución para paliar esta situación, está en manos de todos a través de mil formas distintas, reducir la emisiones de co2, cogiendo menos el coche, poniendo la calefacción o aire acondicionado a temperaturas templadas, aislar los domicilios, reciclar, plantar árboles, etc…
Pero la noticia y es lo que quería destacar en este artículo, es que por fin está lloviendo, y eso en España y con todo lo que he comentado se puede considerar buen tiempo; como diría un castizo, “nos ha venido como agua de mayo”.
Mi pueblo Molina de Aragón, se sitúa en una de las comarcas con mayor altitud de todo el interior peninsular y en sus inmediaciones nacen algunos de los ríos más importantes de nuestro país. El Tajo, el Cabriel, el Turia, el Júcar, etc… por lo tanto observando el caudal de estos ríos en su cabecera tenemos un buen indicador de la situación en la que se encuentran sus cuendas hidrográficas y en general la situación del país en materia hídrica.
El río que pasa por la capital de la comarca, es el río Gallo, famoso por su riqueza piscícola basado en trucha común o de río y cangrejos (muy diezmados pero aún existentes.) este río nace en Orihuela del Tremedal (Teruel) y de seguida se introduce en la provincia de Guadalajara; todo este recorrido transcurre subterráneo por las poblaciones de Motos, Alustante, Tordesilos, Setiles, etc… para un comenzar a brotar de nuevo en superficie en entre las localidades de Morenilla y Chera, todo este tramo transcurre entre suaves colinas y amplios campos de labranza hasta que llega a Prados Redondos donde se encajona en un barranco llenos de sabinas hasta la localidad de Castilnuevo, de nuevo aquí hasta Molina, el río conforma un amplio valle que por fin se convierte en impresionante barranco, al llegar a la Virgen de la Hoz, ya dentro del parque natural del Alto Tajo, desde aquí hasta su desembocadura en el Tajo, por el Puente de San Pedro, se convierte en un río de aguas bravas, encajonado entre enormes paredes de conglomerado e impresionantes pinares.
Así pues el río Gallo se convierte en un río más salvaje en su último tramo, siendo muy suave su transcurrir en la primera mitad de su camino, eso conlleva que sea un río muy regular, es decir que haya sequía o no su caudal viene a ser el mismo, puesto que los valles que lo circundan sueltan muy despacio el agua que toman de las nieves y las lluvias; por lo tanto es muy poco común que el río pase desbordado por la localidad de Molina.
Pues bien que estos días ha llovido mucho lo dice el hecho de que el Gallo va por los tres ojos del puente románico que hay en Molina, esto queridos lectores y amigos es muy bueno, pues esta agua que irá al Tajo, contribuirá a paliar la enorme escasez que tienen los pantanos de Entre peñas y Buendía, y que abastecen a gran parte de Castilla la Mancha, Madrid y al trasvase Tajo-Segura.