Hace unos días, acompañando a un familiar a consultas externas del hospital, mientras esperábamos el turno de atención, pude ojear un periódico que alguien había dejado olvidado, y digo que sólo lo ojeé, porque me resultó complicado leerlo, era la Gaceta.
La verdad es que el nivel de manipulación y tergiversación, así como la mala intención de los titulares, lo convertían más bien en un tebeo o en un texto destinado al humor y a la carcajada; muy lejos del rigor, seriedad y objetividad que se presume de un medio de comunicación.
El problema es que no solamente un medio tergiversa y manipula, todo el mundo es conocedor de medios públicos como Tele Madrid o Canal 9, los cuales son un ejemplo de lo que nunca deben de ser medios de comunicación públicos, pero así mismo muchos medios de índole y editorial conservadora, se han sumado a esta espiral de tergiversación y también de menos precio e insulto.
Hace unos días la portada del Diario la Razón, donde para aparentar que una manifestación había sido un fracaso manipularon la fotografía, dejando incluso cuerpos de manifestantes sin cabeza…
Portada manipulada
Pero volviendo al tema del insulto así como de la contrariedad, el periodista Nacho Escolar, ha hecho un resumen de algunos de los calificativos que desde estos medios conservadores, se han realizado hacia los integrantes del movimiento 15 m, cayendo muchas veces en contrariedades; así pues se ha dicho de los indignados que son sediciosos, que son agresivos, que son pulgosos y lujuriosos, que son ilegales, que son perroflautas, que son violentos, que son delincuentes, que son unos golpistas como Tejero, que son totalitarios, que son antisistema, que tienen entrenamiento en kale borroka de ETA, que son una guerrilla urbana, que son cuatro gatos malcontados, que son niñatos enrabietados, que son batasunos, que son cachorros de Rubalcaba, que son ratas, que son insalubres, que son delirantes…
Es complicado encontrar un colectivo, que haya recibido más descalificaciones en tan poco tiempo, excluyendo eso sí y en primera persona al Presidente del Gobierno Rodríguez Zapatero, y al Vicepresidente Pérez Rubalcaba.
Pero por otro lado también es verdad que todos estos insultos y menosprecios, no ha minado la valoración y el respaldo que la ciudadanía otorga al movimiento 15 m.
Nacho Escolar en Diario Público, se pregunta si no es contradictorio ser esbirro de Rubalcaba y pro-etarra… A mi entender es totalmente contradictorio.
La cuestión y el resumen de todo ello, es el verdadero miedo que tienen los medios más reaccionarios a que la ciudadanía piense o hable en voz alta, que temor tienen a la participación e implicación de la gente; tal vez porque todo ello puede desmontar las manipulaciones y tergiversaciones de sus medios. Y mostrar a la opinión pública que ni unos son tan malos ni los otros tan buenos.
Y como se suele decir el tiempo dejará 
