La representante del esperpento político en nuestro país, la Alcaldesa de Valencia Rita Barberá, esa que cuando el Papa hablaba del matrimonio indisoluble entre un hombre y una mujer aplaudía de forma exorbitada, ayer dio muestras de nuevo de su gran irresponsabilidad. De todos es conocida la deficiente situación económica en la que se encuentran tanto la Generalitat como
Siempre se llena la boca doña Rita, de decir que no han subido los impuestos en Valencia, esta afirmación incierta en todas sus perspectivas: el Impuesto de Bienes Inmuebles (la antigua contribución) se ha aumentado de forma desmesurada, así como el impuesto de vehículos, las tasas, los precios públicos, etc… se ha puesto la famosa hora en decenas de calles de la ciudad, y ahora pese a que
¿Pero a cambio de todo ello qué…? Aunque los barrios siguen carentes de toda clase de servicios y dotaciones, no nos preocupemos, nuestra Alcaldesa y nuestro President, se van a partir el pecho, para que unos ricos extranjeros puedan venir a hacer unas pre-regatas en nuestras aguas, ¿el precio? Nada sólo 20 millones de euros. Si total seguro que se paraliza el país para ver como estos multimillonarios juegan con sus preciosos barcos.
Y no os enfadéis porque la Generalitat no aplique la Ley de Dependencia, o porque
Todo es cuestión de gustos.