VICENTE Y BETSABETHMuchos días, por razones de trabajo, por compartir una afición, por ser miembro de una misma entidad, etc… conoces a personas, que en la mayoría de veces tienen historias de vida parecidas a las tuya, o que entran dentro de los parámetros de la normalidad, y que por tanto no te dejan impactados al conocerlas.
Hace unos días, a mí me ocurrió todo lo contrario; a eso de las diez de la mañana alguien llamó por equivocación al lugar donde trabajo, al escuchar lo que esta persona relataba, un compañero me pasó la llamada, y tras conocer mínimamente su historia, le pedí que quedásemos para ver como podíamos paliar su situación.
Se trata de Vicente Navarro, un valenciano de unos cincuenta años, que debido a una mala racha y a los avatares de la vida, su esposa y él se vieron obligados a tener que abandonar la vivienda en la que vivían arrendados en el barrio de Benimaclet de Valencia, y a quedarse literalmente en la calle; esto fue el 3 de febrero de 2009.
Pero a esta complicada situación hay que sumarle otra adversidad más; y es que la esposa de Vicente, una guapísima venezolana de nombre Betsabeth sufre una gran discapacidad, que según informe médico ronda el 87%; nació con cinco meses, y ello le acarreó desde su arribada al mundo una nula movilidad; de hecho sólo puede mover los brazos y la cabeza.
Al principio pernoctaban en los cajeros de las distintas entidades bancarios de la avenida de Primado Reig, pero hace un año y medio aproximadamente, cansados de vagar de un lado a otro decidieron establecerse en mitad de un bulevar junto a las nuevas facultades de la Universidad de Valencia, próximos a la Avenida de Cataluña y dels Tarongers.
HOGAR DE BETSABETH Y VICENTE, JUNTO AL CAMPUS DELS TARONGERS Allí entre dos bancos, en un viejo y desvencijado armario tienen todas sus pertenencias: ropa, un hornillo que un vecino de la zona les regaló, los medicamentos que Betsabeth necesita, y alguna lata de comida.
PERTENENCIA DE BETSABETH Y VICENTE
HORNILLO DONDE GUISANTambién una sombrilla que Vicente encontró en un contenedor y que tras repararla utilizan para los días de lluvia.
Por las noches allá a las once, en mitad del bulevar, Vicente monta una tienda de campaña donde Betsabeth y él pasan las noches, para evitar el relente, el rocío y el fresco del alba; por la mañana a eso de las siete, se levantan y desmontan la tienda para que nadie les llame la atención.
TIENDA DE CAMPAÑA DONDE PASAN LAS NOCHES
Betsabeth tiene muchos problemas para entrar en la tienda, Vicente la tumba en el suelo, y arrastrándola consigue entrarla dentro.
Una vez que Betsabeth se acuesta Vicente acude a una fuente del campus universitario, donde coge agua, para asearse y lavar su ropa.
Betsabeth es Licenciada en Derecho, y ahora está haciendo el doctorado de mercantil; así pues al estar matriculada en la Universidad, y por la proximidad con el campus, por la mañana Vicente la lleva en la silla de ruedas (también regalada por una vecina, ya que su madre fallecida ya no la necesitaba), y allí en el baño de discapacitados se asea y pone a cargar la batería del móvil que tienen.
Al poco de quedarse en la calle Betsabeth y Vicente, acudieron al edificio central del Ayuntamiento de Valencia, desde allí les remitieron a los Servicios Sociales de Benimaclet, y allí les indicaron que tenían derecho a percibir una ayuda denominada de emergencia; pero a los pocos días les dijeron que el fondo de previsión ya se había agotado y que la volviesen a solicitar para el año 2010, a ver si en esa ocasión había más suerte.
También les indicaron que podían solicitar otra ayuda denominada Paga de Ciudadanía, y que lo hicieran rápido pues tardaban entre ocho y diez meses en contestar; esta tardanza y el hecho de que en caso de que se la concediesen sólo fuera para once meses, (según les dijeron en los servicios sociales), hicieron desistir a Betsabeth y Vicente de solicitarla, ya que pensaban que pronto saldrían de esta situación.
Vicente después pidió la renta activa de reinserción, que suponía unos 426 euros al mes, pero por no tener domicilio donde notificarle y comunicarle las diversas cuestiones, según me cuenta Vicente, le quitan las ayudas cobrando de éstas sólo dos mensualidades.
El único organismo que les ha prestado cierta atención y ayuda ha sido el CAS, centro de ayuda a los sin techo, que en las noches más frías del invierno les ofrecen ir a un albergue, aunque Betsabeth y Vicente no quieren ir, puesto que los albergues son inaccesibles con cantidad de barreras arquitectónicas, y porque además los separan, lo que hace que Vicente no pueda cuidar a Betsabeth, totalmente dependiente de él.
También han solicitado a la Generalitat las ayudas que otorga la Ley de Dependencia, pero la Conselleria todavía no ha contestado.
Según me cuentan Betsabeth y Vicente la Policía Local va de vez en cuando, a decirle que allí no pueden tener sus enseres, y que desde el día 18 al 22 de abril no pueden estar ahí, pues se celebra en Valencia la Copa del Rey, y ver a pobres en la calle no da una buena imagen de la ciudad… Si esto es verdad yo les contestaría a estos policías, que no se preocuparan por la imagen, ya que entre Camps, Barberá, Rus, Fabra y Ripoll, la imagen ya está por los suelos.
Pero por si fuera poco, en estos momentos Betsabeth, está embarazada de tres meses y medio, y su mayor temor es que si no salen de esta situación tal vez los servicios sociales puedan quitarle la custodia de su bebé.
Hace unos días Betsabeth y Vicente han celebrado su aniversario de boda, éste último ha regalado a su esposa unos preciosos claveles que han sembrado en el suelo, junto “a su casa”
REGALO ANIVERSARIO DE BODA
Así pues estimad@s amig@s bloguer@s; lectores/as de este humilde blog, os pido ayuda para que encontremos trabajo a Vicente, para que de esta manera puedan salir de estas condiciones y abandonar la calle.
Parece ser que Vicente es una persona muy voluntariosa y mañosa; y ha hecho de albañil, pintor, trabajos en el campo, etc…
De momento he liado a un grupo de amigos para hacer una colecta para intentar que puedan vivir en una casa, a la cual si quieres colaborar, puedes ponerte en contacto conmigo a través del correo electrónico: oscar-pardo@hotmail.com; pero lo más importante es encontrarle un trabajo.
Es increíble que en la Comunidad donde “disparamos” con pólvora de Rey, en grandes fastos, eventos y presuntas corruptelas varias, los servicios y ayudas sociales sean tan insuficientes y limitados.
