lunes, 14 de febrero de 2011

UN PASEO POR ESCALERA. Comarca Molina de Aragón - Alto Tajo



Estimados amigos blogueros, como muchos de vosotros ya sabéis una de mis patrias chicas es la comarca de Molina de Aragón en la provincia de Guadalajara, y es que el que suscribe estas letras tuvo el honor y el placer de nacer y pasar su infancia y adolescencia por estos lares.

Esta tierra, comprende una de las zonas habitadas más altas del país, y que por ende conlleva unas características y vicisitudes que hacen de la comarca de Molina de Aragón – Alto Tajo un lugar único para recrear los sentidos y reconciliarse con el medio natural.

En muchas ocasiones os he hablado de rincones, parajes, pueblos, fiestas, tradiciones y gentes.

En esta ocasión os quiero acercar hasta una localidad de original nombre: Escalera.

Escalera se encuentra ubicado en un altiplano en torno a los 1200 metros de altura, entre frondosos bosques de sabinas y pinos, asomando a los valles de los ríos Bullones y Gallo.

En invierno sus habitantes a penas llegan a la decena, pasando de cien en el período estival.

Hace unos años varias familias se establecieron en el pueblo y crearon un precioso alojamiento rural y un establecimiento que hace velas y ornamentos con cera natural de las colmenas de la comarca. Aquí tenéis el enlace del alojamiento rural: http://www.eldescansillo.net/

Las calles del pueblo, estrechas, apacibles y austeras permiten escuchar los sonidos que proceden de la naturaleza abrupta que apenas les separa; y desde las mismas, se escuchan el trinar de cientos de pájaros, las berreas de los ciervos, los cencerros de los terneros que pastan, el ladrido de los perros pastores, o el cansino transcurrir de las grullas, que por noviembre de ida y por febrero de vuelta sobrevuelan los limpios cielos del Alto Tajo.

Hace años, el humanista José Antonio Labordeta con su país a la mochila también pasó por esta localidad, descubriendo los secretos que la misma esconde.

Uno de estos “secretos” son las denominadas parideras de lo bardo; éstas son un vestigio de la arquitectura celtíbera y se tratan de establos donde recoger el ganado, construidas de forma circular alrededor de un gran sabina, que hace de pilar central, y en la cual se apoyan palos y ramas que en dirección a la pared de piedra hacen una perfecta estructura, la cual cubren con tupidas ramas de sabina, impermeabilizando el techo, y proporcionando un ambiente acogedor al ganado.

Pero Escalera también es conocido por la calidad de las aguas que da su fuente, la cual se inauguró allá por 1823; así lo dice una inscripción. “Siendo alcalde Leandro Martínez vino la fuente”.

Y de igual manera que ocurre a lo largo y ancho de todo el Parque Natural del Alto Tajo, hay decenas de caminos y senderos para perderse y desconectar del mundo.

Acabo el post, con varias intencionalidades, la primera es la de no aburriros, la segunda es la recomendaros que cuando podáis os escapéis a la comarca de Molina de Aragón – Alto Tajo, y la tercera es que reflexionemos sobre los cientos de pueblos que están en situación crítica por la falta de población, y como la mayoría nos concentramos en las grandes ciudades con una cada vez peor calidad de vida.

6 comentarios:

Pepe del Montgó dijo...

Conozco muy poco de Guadalajara pero con lo que voy viendo en los blogs amigos se me está despertando el interés por andar por allí.

Anónimo dijo...

Hola: conozco Molina pero Escalera y su entorno no. Así que, creo que tendremos que ir.

Jabo dijo...

Gracias Oscar, por enseñarnos y trarnos estas espléndidas imágenes de una comarca totalmente desconocida para mi. Tiene pinta de ser una tierra por descubrir grandes cosas.
Abrazo. Jabo

Juanjo Rubio dijo...

Pues gracias por invitarnos a tu paseo, me ha gustado. Saludos, compañero.

Rafa, dijo...

Una descripcion muy buena, y como dices, Molina y sus alrededores son un lujo para visitar, te lo dice un compañero que como bien sabes, pasa sus vacaciones en Terzaga.
Saludos

Christian Gilaberte Sánchez dijo...

Añadiré Molina de Aragón y Escalera en mi lista de pueblos por visitar.

Un abrazo.

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